Tuesday, July 14, 2009

LA INFORMACIÓN CONFUNDE LAS IDEAS

La exposición de la Sociedad Rural en Mariano Roque Alonso, constituye una clara expresión de la calidad y nivel intelectual de empresarios y políticos. Escuchamos afirmaciones que nos inclinan al análisis, con la reserva de que los que se autodefinieron como representantes “del campo” cometieron una injusticia discriminatoria inaceptable. No dieron lugar a vacas y caballos que debieron tener una ubicación privilegiada en el palco oficial. Estimo que estos cuadrúpedos, legítimos representantes de la expresión “el campo”, a diferencia de los otros, con sombrero Stenson, podrían haber introducido comentarios inteligentes y claros sobre conceptos que inclinan a la duda y el misterio.
Ocurre que hasta ahora nadie ha definido con claridad que es la “izquierda” calificación que para empresarios, políticos y muchos periodistas constituye una nebulosa perversa indefinible que puede carcomer los valores profundos de la nacionalidad. Parece ser que esos malditos izquierdistas pretenden cambiar el país y terminar con el feudalismo, Denuncian los acomodos para robar al estado, quieren obligar a pagar impuestos, evitar la contaminación con los agroquímicos venenosos, descubrir quien es realmente propietario legítimo de un pedazo de tierra y quien la robó o la recibió por obsecuencia, o maniobras varias en el campo del delito. Estas intenciones odiosas e insoportables configuran para los próceres de la Rural, el más puro izquierdismo. El presidente de la Rural denunció la violencia en le campo, mientras estimuló el tractorazo que en su opinión no parece constituir una expresión de violencia. Esto nos lleva a concluir que a violencia motorizada no es violencia, pero la violencia pedestre, si es violencia. Tiene razón, como soportar la exhibición miserable de hombres, mujeres y chicos sucios y rotosos interceptando los tractores de un millón de dólares que permiten a los salvadores de la patria sostener la justicia distributiva dando a los integrantes de la Rural lo que se merecen y a los campesinos terroristas y subversivos también lo que se merecen. Esto es obligar al respeto por el orden y la organización institucional con el democrático instrumento de palos y coces, según quien los propina.
Las indefiniciones, izquierda, orden, respeto por el statu quo, nos motivan la generosa idea de conseguir una beca para que el presidente de la Rural se incorpore a la escuela primaria y aclare sus conceptos, lo que no servirá a nosotros para interpretarlo en el futuro, si le toca una maestra alfabeta, condición que no debe interpretar como un agresión subversiva. Finalmente, debe descubrir que conocer el significado de las palabras no es una cosa mala, y eventualmente se puede extender el conocimiento a vacas y caballos, auténticos representantes del campo, sin olvidar tractores y cosechadoras que por ahora no hablan pero seguramente piensan mas que sus propietarios y un día de estos se sublevan. No contra la injusticia, sino contra a ignorancia. Los discursos de los ruralistas, hay que llamarlos de alguna manera me recuerda un ganadero amigo que decía: “No solo somos brutos, sino que estamos orgullosos de serlo” Entienden como es la cosa?

Thursday, July 2, 2009

EL ESCRITOR EN EL MUNDO GLOBALIZADO

El tema de esta reunión consiste en analizar la posición del escritor en el mundo globalizado. Habrá que empezar por saber de que se trata, para descubrir de que manera puede afectarnos.

La globalizacion constituye una expresión semántica nueva, que esconde un concepto viejo.

Todos los imperios a lo lago de la historia intentaron ser protagonistas de la globalizacion, ubicados en la posición, no se si más cómoda, pero si más beneficiosa.

Intentaron, y lograron en muchos casos, manejar la globalizacion en su beneficio. El Imperio Romano fue global, porque abarcó prácticamente todo el mundo conocido, en un territorio que los romanos consideraban valioso.

La globalizacion funcionó. Las condiciones de dependencia que impuso el Imperio, fueron sencillas. Los pueblos debían someterse a la autoridad romana, conservando sus propias autoridades e instituciones. Solo que debían pagar tributo al emperador.

Los que intentaban evadir esa responsabilidad, eran crucificados. Así la globalización se convirtió en la expresión formal de la dependencia.

A veces otro proyecto de imperio le disputaba el dominio a los romanos. Esto ocurrió con Cartago. Allí la dependencia se convirtió en interdependencia neurótica.

La vocación globalizadora de Roma no fue un invento de los romanos. Los Persas hicieron lo mismo, también los hindúes y los chinos. Por este motivo los chinos se enfrentaron hace mil años a los vietnamitas, que entonces constituían el reino de Nam Viet y eran temibles. Igual que ahora. Si les preguntamos a franceses y norteamericanos.

El Imperio Español se organizó bajo el signo de la globalizacion.

Con genialidad geopolítica los españoles organizaron en América un imperio global, con cuatro virreinatos y una capitanía general. Después aparecieron los criollos patriotas y demolieron esa obra de arte de estrategia política, y la convirtieron en veinte países escasamente independientes, esencialmente subdesarrollados e incapaces de controlar su propia gobernabilidad.

Los proyectos globalizadores fueron continuados por Francia con Napoleon, por Inglaterra con Disreli , por Rusia con Catalina.

La globalización tiene que ver con los espacios económicos. Así surgió, antes que en ninguna otra parte en Gran Bretaña la revolución industrial, aunque este país era el mas atrasado de Europa. Entre Inglaterra, Escocia y Gales constituían un espacio económico integrado.

Ocurrió lo mismo con Estados Unidos. Las trece colonias se integraron y ocuparon todo el territorio, desde el Atlántico al Pacifico. Fue una comunidad que mantuvo su homogeneidad, para lo cual debió matar a los indios, los dueños originales del territorio y los bisontes que constituían su alimento favorito.

Rusia intentó la misma cosa, para lo cual construyó el ferrocarril Transiberiano. Necesitaba interconectar y unificar su territorio para establecer un mercado integrado, bajo el dominio del imperio zarista.
El problema para Rusia consistió en que hubo una revolución y conquistó el poder un movimiento político que no creía en el mercado.

De manera que Estados Unidos de América, Francia, Inglaterra, Rusia, en los últimos siglos, intentaron hacer lo que España nos entregó organizado, y nosotros destruimos, esparciéndolo como un fatal rompecabezas. Ahora, varios siglos mas tarde, intentamos armarlo nuevamente.

Esta larga historia con que los estoy aburriendo es indispensable para entender que cosa objetiva e inevitable es la globalizacion.

La guerra es un buen negocio para los países del primer mundo, grandes fabricantes de armamentos, cuando son de alguna manera controladas. Para eso, el sistema debe funcionar dentro de ciertos parámetros, de los cuales los países debe salirse esporádicamente por voluntad y no por azar.

Cumpliendo esta mecánica de sustitución de la guerra por el comercio, algunos empresarios entendieron que era tan buen negocio venderles carne envasada a los vietnamitas, como rociarlos con bombas de napalm. Además, la actividad comercial tenía menos riesgo.

Concluyo entonces, en que en mi opinión, la moderna globalizacion constituye la expresión semántica de la vieja dependencia imperial. Obviamente regulada por nueva normas que adscriben a relaciones civilizadas. Necesarias, para que no se tornen en incivilizadas.

El mundo no se divide en izquierdas y derechas. Eso constituye, como decía Ortega y Gasset una especie de hemiplejía moral. Los países se dividen en países desarrollados y países subdesarrollados.

En consecuencia, así lo enseña la historia, los países subdesarrollados dependen de los países desarrollados.

A la vez los países subdesarrollados son generalmente proveedores de materias primas, y los desarrollados son proveedores de productos industriales.

Ocurre que cada día las materias primas valen menos en el mercado internacional y los productos industrializados valen más cada DIA.

La consecuencia de esa penosa relación de intercambio, que nos agrede, se llama Deterioro de los Términos del Intercambio.

Ustedes se preguntaran que tiene que ver todo esto con el arte y particularmente con la literatura. Pues tiene muchos que ver.

Cuando los europeos descubrieron América, los americanos descubrieron Europa. Si se analiza la historia de la cultura a partir de ese episodio se verá que la interdependencia cultural constituyó una constante, aunque los dioses nativos se hayan disfrazado de santos cristianos.

Terminado el auge de los imperios, mediante una inteligente negociación política, los imperios se unieron. Su objetivo fue no pelear batallas menores. Se dedicaron a crear nuevas condiciones que aseguraran la dependencia a que serian sometidos los países subdesarrollados. Estos, por su realidad socio económica. carecían de las condiciones objetivas, que pudieran permitirles participar en el gerenciamiento del negocio.

El poder económico esta dado por la acumulación de recursos financieros y tecnología, orientados por una lúcida concepción política. Esta es la condición del mundo contemporáneo.
Nosotros, en América, integramos el grupo de los dependientes. Se trata de una verdad objetiva que no debe lastimar nuestro orgullo.

Los escritores debemos conocer esta realidad objetiva, en el orden político, económico y social.
¿Y la Cultura? Basta observar los anaqueles de cualquier librería de América para descubrir que la globalización, instrumentada por la vieja voluntad de dominio del primer mundo, se nos ha impuesto, mucho antes de que se firmaran pactos o acuerdos económicos.

Pero a la vez, por la natural gravitación de las ideas y por la capacidad creadora de nuestros artistas, se ha producido también el proceso inverso. Nuestra cultura americana accede al mercado de Estados Unidos, de Europa y aun de algunos países de Oriente adscriptos al primer mundo. Desde Ricky Martin hasta García Marques.

Se trata de un proceso paralelo de dependencia e interdependencia.

El proceso es inevitable. Conviene reflexionar sobre la manera de proyectar nuestra capacidad creadora. Aguzar la imaginación y generar la mejor metodología destinada a ganar espacios en el mundo cultural internacional, que suele ser bastante hermético.

Sin embargo, yo estoy convencido de que casi todo depende de nosotros. Debemos estar dispuestos a competir con nuestras relativas fuerzas. No es el caso de dar la batalla por perdida antes de empezar. Leernos entre nosotros no me parece malo de ninguna manera. Pero tal vez es insuficiente.

Nuestros libros son expresión de nuestra realidad americana,
Aun cuando sostengo que el arte no tiene nacionalidad. Sin embargo es por lo menos bastante improbable, que la característica formal y esencial de nuestros libros puedan ser adjudicada a un neoyorquino, un finlandés o un francés de París.

Tenemos la necesidad vital y la obligación, de crear y exhibir nuestro patrimonio cultural.

Estamos irreversiblemente inmersos en el mundo globalizado no por propia decisión. Es la natural consecuencia de una fatalidad histórica.
Tratemos entonces de aprovecharlo. La comunicación se funda y se expresa a partir de estructuras económicas y políticas cuya naturaleza no debemos ignorar.

Debemos hacer un esfuerzo conjunto entre escritores y editores.
Muchos editores son solamente imprenteros. Si no tienen organización ni entusiasmo para distribuir dentro de las fronteras del país, es poco probable que tengan ideas pragmáticas para distribuir fuera del país.

Es curioso que no se aprovechen las ventajas comparativas de Paraguay, precisamente dentro de la región, a través del MERCOSUR y hacia los otros países americanos, Estados Unidos o Europa mediante el aprovechamiento de la globalizacion.

En Paraguay se puede editar a menor costo que en muchos países del mundo. Un plan conjunto entre escritores y editores, tal vez con alguna ayuda de las instituciones del gobierno organizadas para promover el libro, podamos romper el cerco y difundir nuestra literatura fuera de las fronteras.

Pero nosotros debemos poner las ideas y la imaginación. Si bien la globalizacion es una dependencia, también constituye una buena apertura para la difusion de nuestra cultura.

Internet también es un camino. La Sociedad de Escritores del Paraguay debe tener su pagina WEB para difundir libros, congresos y promover el intercambio. Lo mismo cada uno de nosotros podemos desarrollar nuestra propia pagina WEB.

Propongo que esta Sociedad de Escritores y las Subsecretaría de Cultura de la Nación, organicen un programa de difusión internacional, con la misma energía y pragmatismo con que apelamos a los medios de comunicación locales, para anunciar un evento o el lanzamiento de un libro.

La globalizacion achicó el mundo. De manera que la diferencia entre la promoción local y la internacional es un problema de grado.

Creo que debemos ponernos a trabajar, ahora mismo. Gracias.